A continuación
presentaré un tema que me ha parecido muy sugestivo, me motivo a escribirlo al
ver un documental de Discovery Channel (no muy bueno), que trataba sobre el
estudio de testimonios de posesiones demoníacas desde el punto de vista de la
historia y la psicología. Despertó mi curiosidad saber más aspectos culturales,
por ello me puse a investigar sobre el tema, en internet hay mucha información
que incluso es contradictoria, así que decidí consultar libros teniendo como
cabecera una antología de ciencias ocultas de la editorial Espasa que una amiga
me prestó. Bueno, sin más rodeos les comento lo que entendí.
Desde hace varios
siglos se han realizado variados estudios para clasificar el mundo de los
demonios, autoridades en el tema como Johannes Weyer, Alfonso de Spira, Peter Binsfield,
Psellon, Sebastían Michaelis, Francesco Maria Guazzo y Francis Barret, nos dan de manera más digerible una
explicación de las jerarquías y las características de estos seres.
Aunque la
religión más preponderante en el mundo sólo reconoce la existencia de un
demonio, estudios como los de Johannes Weyer publicados en 1568, han
considerado que el reino diabólico está conformado por un total de 7,405,926
demonios, los cuales están divididos en 1,111 legiones con 6.666 seres cada
uno, aquí podemos observar que se clasifican en servidores, príncipes, caballeros
y condes, todo esto formado en una
pirámide en cuyo vértice se encuentra el emperador.
Alfonso de Spira
en 1467 los categoriza en diez clases que van de acuerdo a sus funciones:
1.
Demonios
del destino. Marcan el futuro de las personas
2.
Trasgos.
Tienen más malicia que maldad.
3.
Íncubos
y súcubos. Son demonios masculinos o femeninos que pueden mantener relaciones
con los seres humanos.
4.
Ejército
y hordas. Son los lacayos que se
desplazan para hacer el mal.
5.
Demonios que inducen a los viejos a ir a los aquelarres o reuniones de brujas.
6.
Drudes.
Personifican la mentira y la maldad, suelen ser femeninos.
7.
Demonios
que nacen en la unión carnal con seres
humanos.
8.
Demonios
engañosos.
9.
Demonios
que inducen a los santos al pecado.
10.
Demonios domésticos. Viven con los humanos en sus hogares adoptando formas animales.
En 1589, Peter
Binsfield, autor del Tratado sobre “La declaraciones de hechiceras y brujas”,
hace una clasificación en función a los siete pecados capitales:
1.
Lucifer
– Soberbis
2.
Mammón-
Avaricia.
3.
Asmodeo-
Lujuria
4.
Satanas-
Ira
5.
Belcebú-
Gula.
6.
Leviatán-
Celos.
7.
Belfegor-
Pereza.
A principios del
siglo XVII a petición del obispo Francesco Maria Guazzo, mejor conocido como
Guaccio, miembro de la congregación de San Ambrosio sd Nemus, presenta en 1608
su gran obra “Compendium Maleficarum”, en la cual hace una síntesis que
anteriormente había realizado Michael Psellos en el siglo XI, de las ocho clasificaciones establecidas, las
resume en seis.
1.
Demonios
que ocupan las capas superiores del aire y que jamás entran en contacto con los
humanos.
2.
Demonios
de las capas inferiores del aire que provocan tormentas devastadoras.
3.
Demonios
terrestres que habitan en áreas naturales
4.
Demonios
de agua, son femeninos y destruyen la vida de animales acuáticos.
5.
Demonios
subterráneos, originan terremotos y vigilan los tesoros enterrados.
6.
Demonios
nocturnos, evitan la luz, son negros y muy malvados.
En 1613 el
sacerdote Sebastián Michaelis publicó “Relato excelente sobre la posesión y
conversión de una pecadora arrepentida”,
donde hace otra relación de acuerdo a los atributos que poseen, estos se
dividen en tres categorías con 16 protagonistas.
Primera jerarquía-
integrada por ocho demonios:
2.
Leviatán.
Ataca creencias religiosas, su adversario en Pedro.
3.
Asmodeo.
Utiliza la lujuria como seducción, su adversario es Juan.
4.
Baalberith.
Sugiere el asesinato y la blasfemia, su adversario es Bernabé.
5.
Astaroth.
Seduce mediante la pereza y la vanidad, su adversario es Bartolomé.
6.
Verrin.
Seduce mediante la impaciencia, au adversario es Bartolomé.
7.
Gresil.
Seduce con la impureza y la suciedad, su adversario es Bernardo.
8.
Sonnilón.
Seduce con el odio, su adversario es Esteban.
Segunda
jerarquía- integrada por cinco demonios.
1.
Karo.
Seduce sin la menos compasión, su adversario es Vicente.
2.
Camal.
Seduce mediante la lujuria, su adversario es Juan Evangelista.
3.
Clavel.
Seduce a quienes se oponen a la pobreza, su adversario es Martín.
4.
Rosal.
Seduce mediante la sensualidad, su adversario es Basilio.
5.
Aoplador.
Seduce a los desobedientes, su adversario es Bernardo.
Tercera
jerarquía- integrada por tres demonios.
1.
Belial.
Seduce mediante la arrogancia, su adversario es Francisco de Paula.
2.
Olivier.
Seduce mediante la ferocidad y la codicia, su adversario es San Martín.
3.
Juvart.
Seduce encarnando distintos cuerpos de personas.
Otro autor,
Francis Barret en su obra “El mago, un sistema de filosofía ocultista” los clasifica
de manera que hace una síntesis de todo lo ya mencionado:
1.
Mammón,
príncipe de los seductores.
2.
Asmodeo,
príncipe de las venganzas viles.
3.
Satanás,
príncipe de las brujas y brujos.
4.
Pitio,
príncipe de los espíritus mentirosos.
5.
Belial,
príncipe de las injusticias y fraudes.
6.
Meruhem,
príncipe de los espíritus pestilentes.
7.
Abaddón,
príncipe de la guerra.
8.
Astaroth,
príncipe de los acusadores e inquisidores.
¿Interesante? Bueno
eso depende de lo que estés buscando, en la siguiente parte haré la descripción
de la jerarquización que concibe Collin de Plancy, la cual me parece muy
interesante ya que los divide desde un punto de vista políticamente funcional.
Como verán,
expongo la información de manera clara y consisa, no puedo profundizar más en
el tema porque hablar de cada demonio y cada concepto sería interminable, si se
me da la gana después haré apartados de cada uno, me recuerda que hace meses
hice uno de Astaroth, creo que sería de esa forma. En corto pueden consultar un libro que
se llama “Ángeles” de Malcom Godwin, ahí pueden encontrar más detalles sobre
cada demonio.
Rust In Peace.